En las capas geológicas donde existen sedimentos correspondientes a las distintas edades del planeta lo que antes fue lava contiene todavía minerales que conservan su alineación magnética original, que puede medirse con la tecnología del radio carbono. Así se sabe que la última inversión de los polos magnéticos ocurrió hace 15.210 años.
Durante la historia de nuestro planeta, han sucedido cinco grandes extinciones masivas, debidas todas a causas magnéticas, provocando la desaparición de más de 3/4 partes de las especies en cada evento. También se han dado otras extinciones de menor magnitud. Mientras más lejanas en el tiempo, más difícil es saber cómo se produjeron.
Hace 65.5 millones de años, entre el Cretácico y el Terciario, una inversión acabó con los dinosaurios y muchas otras especies de animales marinos y terrestres.
La peor de toda las extinciones es la extinción del fin del Pérmico, evento que en realidad consistió de dos extinciones con 10 millones de años de diferencia, cuando desaparecieron el 95% de las especies.
La inversión magnética provoca volcanismo, disminución de proporción de oxígeno en el mar, extremos de temperatura, oscuridad, pero se va preparando durante miles de años.
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